Teniendo claridad sobre estos conceptos, se puede decir que el tolueno y el xileno son solventes importantes en las recetas de fabricación de los productos adhesivos que se comercializan en el mercado. Sin embargo, con el paso del tiempo se ha venido pensando en la posibilidad de disminuir el uso de este tipo de solventes en la industria adhesiva, debido a que, en su clasificación toxicológica, se ubican dentro de los solventes orgánicos que presentan riesgos relevantes para la salud, particularmente con el uso prolongado.

Adicionalmente producen altas concentraciones de VOC (compuestos orgánicos volátiles) liberado al ambiente.

Aunque siempre se recomienda el uso de elementos de protección personal como son cubrebocas o máscaras especiales, prendas de vestir que cubran la piel y uso constante de guantes, medidas que pueden ayudar en la prevención de enfermedades, en la industria siempre se ha pensado en ir más allá y es ahí donde se formulan los adhesivos STX; los cuales son productos en los que se emplea otra mezcla de solventes que resultan ser igualmente efectivos a las mezclas tradicionales, pero más amigables con la salud de quienes aplican los productos.

Los adhesivos STX llegaron al mercado para innovar y hacer parte del portafolio de una compañía que se preocupa por sus clientes y que siempre busca ofrecer mejores opciones en sus procesos, apostando por productos que se salen del sistema tradicional pero que aun así demuestran tener alto desempeño